domingo, 29 de marzo de 2009

"TODO SE HACE POR MOTIVOS DE DESARROLLO ECONÓMICO Y NO POR CAPRICHO"


Leo en la hoja parroquial que la Junta de Extremadura da el visto bueno, declaración de impacto ambiental positiva, al proyecto de autovía Cc-Ba por la sierra de San Pedro. Y rememoro aquello que decía el señorito Ibarra, antes de la era Griffin, en uno de los debates sobre el estado de la región: “Todo se hace por motivos de desarrollo económico y no por capricho”, aseguraba. Si la Sierra de San Pedro con todo su bosque mediterráneo, dehesas, roquedos, lobos, cigüeñas y buitres negros, águilas imperiales, búhos reales, ungulados, raposas y lince ibérico muerto del asco es susceptible de asfaltarse se asfaltará. La nueva autovía atraerá el tráfico que hoy utiliza la autovía Cáceres-Mérida-Badajoz, y ahorrará 15 minutos en coche, con un coste no inferior a los 360 millones de euros. Localidades como La Roca de la Sierra y Puebla de Obando se verán afectadas económicamente, puesto que no parará ni Dios. El Plan de Infraestructuras del Ministerio de Fomento justifica la construcción de una autovía a partir de una intensidad de tráfico de 7.000 vehículos al día. La carretera Cáceres-Badajoz (EX-100) que discurre apaciblemente por la sierra de San Pedro no se acerca ni de lejos a ese tráfico.

Declarada Zona Especial de Protección de Aves en 1989 y Zona Especial de Conservación en 1998, la sierra de San Pedro anida, comparativamente hablando con el Parque Nacional de Monfragüe y alrededores, un importante número de especies amenazadas y en peligro de extinción:


Algunos de sus electores nos brindaron estas perlas: “Es un verdadero absurdo que una persona que se encuentre en Badajoz y tenga que ir a Cáceres deba pasar por Mérida. Es un atropello a la inteligencia ¿Cómo es posible que en pleno siglo XXI Cáceres y Badajoz se encuentren unidas por una mediocre nacional?”; “No es que me parezca necesario, me parece vergonzoso que aún estemos así en Extremadura, y que estén planteando la posibilidad de pasar por Mérida para ir de una ciudad a otra”. Si para el desarrollo económico de Extremadura es necesaria una autovía de cada pueblo al vecino, se hace con dos cojones. Cáceres y Badajoz no sólo se deberían unir por dos autovías, sino que también deberían unirse por un tren de alta velocidad, por línea aérea y por barco.

sábado, 21 de marzo de 2009

EL GATO CLAVO


Primavera de 2007, Monfragüe.

domingo, 15 de marzo de 2009

EL DOMINGO


Las doce de la mañana del domingo y una incondicional me acucia por teléfono. Qué ya que he regresado debo renovar las entradas del blog. Me defiendo y contesto que estaba en ello antes de que me despertara su llamada. Oigo la palabra “perrazo”. Me difama y cuestiona mi hombría. Río con su ilécebra.
Dos días y apenas sumo doce horas de sueño. A mitad de la jornada del sábado me suelta el notición Pepe ¡Cómo no me lo habéis dicho antes! Lo regaremos con un buen espumoso ¿Publicó algo la hoja parroquial? Sólo el victimismo de Vara.
Pienso en ello mientras me rasco el papo, recojo la dentadura en un vasito de agua sobre la mesilla de noche y arrastro mis zapatillas de paño en chancla hasta el aseo. Las abluciones me rejuvenecen.
Reparo en una grieta de mi dedo. Doy un trago de leche y me desayuno una lata de atún con un puñado de nueces. Llegué de madrugada a casa y la mitad del equipaje está en el coche. Decido bajar a por el portátil en cuanto pase otra vez por el retrete. Cómo pude olvidarme las llaves del garaje dentro del coche. Mi madre dice que tiene copia de la llave del garaje. Pruebo suerte. No. Vuelvo a por otro juego de llaves. Descargo los bultos y pongo a solear en la terraza un par de botas mojadas que necesitaré mañana y unos calcetines chorreando.

Agarro un cuchillo de cocina y leo la prensa digital. “El plazo queda interrumpido”. Me regodeo. “Esto supone que en este momento ya no hay fecha para que se resuelva la Declaración de Impacto Ambiental, cuestión previa a la aprobación del proyecto…” Refinería Balboa, completo. Prosigue la perorata de un indignado Peter Griffin. Corto una punta de aloe de una maceta, que restriego por la llaga abierta de mi diestro anular. Abro una nueva entrada y tecleo. Parece que la herida empieza a cicatrizar.